El spinning es una técnica de pesca en movimiento en la que el pescador se convierte en cazador. Cada lanzamiento, cada recogida del señuelo puede significar una picada, y ahí reside precisamente su encanto. Combina precisión, sensibilidad e instinto. En los siguientes párrafos veremos qué equipo, señuelos y técnicas te ayudarán a burlar al lucio, al lucioperca o a la perca.

¿Qué es la pesca con caña y cómo funciona?
El spinning es un método de pesca de peces depredadores en el que el señuelo artificial se mueve activamente en el agua. Su objetivo es imitar a una presa natural, como un pez pequeño o un insecto que ha caído a la superficie. El pescador atrae el señuelo a diferentes velocidades, ritmos y estilos, creando así la ilusión de vida.
El spinning es un estilo de pesca activo
Este método de pesca requiere una actividad y atención constantes. No se trata de esperar, sino de buscar. Los peces se mueven constantemente. Cambian de profundidad, dirección y estado de ánimo según la luz, la temperatura o la corriente. Un pescador con caña con éxito debe «leer» el agua, observar dónde se encuentran los depredadores y adaptar su estilo de pesca en consecuencia.

La picada suele ser inesperada, sobre todo al recoger el señuelo, cambiar el ritmo o hacer una breve pausa. Y es precisamente ese momento, cuando la caña se dobla y el pez se defiende, el motivo por el que tantos pescadores se han aficionado al spinning.
Equipo básico para la pesca con curricán
El spinning es bonito porque se puede practicar con un equipo relativamente sencillo. Sin embargo, incluso las pequeñas diferencias pueden influir de manera significativa en el resultado. Todo lo que tienes en la mano se refleja directamente en el comportamiento del señuelo bajo el agua. Cada movimiento de la caña, cada tirón o pausa es una señal para el depredador de que hay algo vivo allí... y es entonces cuando llega el ataque.
Cañas y carretes para spinning
La caña de spinning debe ser ligera, sensible y bien equilibrada. Su longitud depende del lugar donde se vaya a pescar:
- Las cañas más cortas (1,8-2,1 m) son adecuadas para pescar desde un barco o en zonas con mucha vegetación.
- Las cañas más largas (2,4-2,7 m) se utilizan desde la orilla, donde se necesita un lanzamiento más largo y preciso.
La acción de la caña (es decir, su grado de flexibilidad) influye en cómo reacciona al picar.
- Las cañas rápidas reaccionan de inmediato y son más fáciles de clavar, por lo que son ideales para lubinas o percas.
- La acción media, por su parte, ayuda a amortiguar las fuertes embestidas del lucio.
Para ello se necesita un carrete fiable y de funcionamiento suave, idealmente con una capacidad de bobina de unos 150 m de hilo. También es importante un freno sensible, que a menudo determina si se puede retener al pez o si se escapa.
Hilos y sedales
El spinning se basa en la sensibilidad. Cada toque del fondo, cada golpe en el señuelo se siente en los dedos. Por eso, la mayoría de los pescadores con spinning optan por un hilo trenzado, que casi no se estira y transmite el movimiento y el contacto más sutil con el pez.
Para la pesca con caña universal, basta con un hilo de 0,10-0,14 mm de diámetro. Al final se añade un bajo de línea de fluorocarbono. Se trata de un material especial que es casi invisible para los peces y, al mismo tiempo, resistente al roce con piedras o ramas. Si te dedicas a la pesca del lucio, utiliza sin duda un cable de acero o titanio. De lo contrario, sus dientes cortarían fácilmente el hilo.
Señuelos artificiales
El señuelo artificial es el corazón de la pesca con cebo artificial. Debe parecer, moverse y comportarse como un pez o un insecto real. Por lo tanto, un buen pescador cambia los señuelos según el tiempo, la profundidad, el color del agua y el comportamiento de los peces.

- Los spinners y los cucharones son clásicos que nunca fallan. Los spinners son adecuados para percas y aspios, mientras que los cucharones son mejores para lucios y truchas.
- Los wobblers son señuelos de madera o plástico con una pala que determina la profundidad de inmersión. Son adecuados para todo tipo de depredadores, según su tamaño y manejo.
- Los señuelos de goma (twisters, rippers, ninfas) son ideales para luciopercas y percas. Funcionan cuando se conducen lentamente cerca del fondo, imitando a un pez pequeño y cansado.
- Los poppers y los señuelos de superficie se utilizan en la superficie, donde imitan a una presa en peligro. La picada de un popper, cuando el pez sale disparado del agua, suele ser una experiencia inolvidable para la mayoría de los pescadores.
Vale la pena tener varias variantes de colores en la caja. En aguas claras funcionan los tonos naturales, mientras que en aguas turbias se obtienen mejores resultados con colores llamativos y contrastados.
Las especies de depredadores más pescadas y cómo capturarlas
En las aguas checas se pueden encontrar toda una serie de peces depredadores, pero cuatro de ellos son auténticos «clásicos de la pesca con caña». Cada uno tiene un carácter diferente, una táctica de pesca diferente y requiere un enfoque ligeramente diferente. Cuando los comprendas, disfrutarás aún más de la pesca con caña.
El lucio: el rey de las aguas checas
El lucio es símbolo de fuerza, ferocidad y elegancia. Se encuentra en estanques, presas y ríos. Suele permanecer en lugares donde tiene suficientes refugios, como cañaverales, árboles caídos o a la sombra de la vegetación acuática.
Para su captura se utilizan wobblers más grandes, señuelos flotantes y peces de goma que imitan a sus presas naturales. Al lucio le encanta el movimiento, por lo que le funcionan los movimientos irregulares y la alternancia de tirones cortos y pausas. La picada suele producirse cuando menos te lo esperas, a menudo justo debajo de tus pies.
Es importante utilizar un cable de acero o titanio, ya que sus dientes pueden cortar fácilmente incluso un hilo grueso. Y si consigues pescar un ejemplar grande, prepárate para una buena lucha. El lucio se defiende hasta el último momento.
El lucioperca: el maestro de las profundidades
El lucioperca es lo contrario al lucio. Es silencioso, tímido y cauteloso. Se mantiene principalmente en zonas más profundas, a donde se retira en busca de alimento, y suele ser más activo temprano por la mañana, al atardecer y por la noche.
Para el lucioperca funcionan bien los señuelos de goma con cabeza jig, idealmente con un movimiento realista y colores apagados (plateado, perlado, marrón verdoso). Es importante guiarlo lentamente justo por encima del fondo, con algún que otro salto o golpe contra el fondo. Cada toque suave puede ser una picada, por lo que la sensibilidad de la caña es fundamental.
Perca: diversión incluso para principiantes
La perca es quizás el depredador más accesible que existe. Se pesca casi todo el año y, a menudo, en lugares donde no lo esperarías. Se puede pescar en bahías poco profundas, en afluentes o alrededor de orillas rocosas.
Para las percas más pequeñas son adecuados los spinners, los pequeños twisters o los micro wobblers, que se manejan de forma lenta y uniforme. Las percas reaccionan al movimiento y al color. En aguas claras prefieren los tonos naturales, en aguas turbias el naranja fluorescente o el rojo.
La pesca con caña ligera tiene un encanto especial, ya que permite sentir cada picada y la resistencia del pez. Incluso los percas más pequeños pueden sorprender con un ataque repentino, y cuando se encuentra un banco, la diversión está asegurada.
El aspio: un veloz que no perdona los errores
El aspio es un depredador con fama de cazador de superficie. Se le reconoce por su característico salto, con el que ataca con un golpe rápido a los bancos de peces pequeños. Se encuentra principalmente en ríos con corriente, pero también en tramos de presas, donde caza en aguas abiertas. Es un objetivo ideal para los pescadores con caña que disfrutan de la acción. Cada uno de sus ataques es relámpago y cada combate está lleno de fuerza.
Para pescar el bolena se utilizan señuelos de acción rápida, como wobblers, flotadores o peces de goma delgados. La clave es la velocidad y la precisión del lanzamiento. El pez reacciona al movimiento, no al olor. La picada suele ser violenta, a menudo ya al caer el señuelo.

5 consejos para una pesca con spinning exitosa
A primera vista, el spinning parece sencillo, pero cuanto más lo conoces, más te das cuenta de la importancia de los pequeños detalles. Cada día en el agua te enseña algo nuevo. A veces funciona un movimiento lento, otras veces uno rápido. A veces los peces reaccionan a los colores vivos, otras veces solo al movimiento natural. Para terminar, aquí tienes algunos principios que te ayudarán a mejorar tu éxito.
1. Trabaja con el señuelo, no con el azar
El éxito en la pesca con curricán no se basa en la suerte, sino en trabajar con el señuelo. Intente cambiar el ritmo, a veces tire más rápido y luego deténgase un momento. Los depredadores suelen atacar justo cuando el señuelo «se detiene», como si estuviera herido.
2. Observe el tiempo y la luz
Los depredadores reaccionan a la presión, la luz y la temperatura del agua. Después del paso de un frente, suelen ser cautelosos, mientras que con tiempo estable son más activos. Por la mañana y por la tarde cazan cerca de la superficie, mientras que durante el día se sumergen a mayor profundidad. En verano, lo ideal es un día nublado o con viento suave, que agite la superficie y oculte sus movimientos.
3. Busque los peces, no espere a que aparezcan
El spinning es una pesca activa. Cambie de lugar, pruebe diferentes profundidades y ángulos de lanzamiento. Los peces se mueven según la corriente, la temperatura y el alimento. Si después de diez minutos de spinning no ha picado nada, siga adelante.
4. Deja que la caña hable
Un buen pescador con caña no solo se fía de sus ojos, sino también de sus dedos. Cada golpe contra una piedra, cada ralentización del sedal puede significar el contacto con un pez. Aprenda a «leer» las vibraciones que le transmite el sedal y a reaccionar instintivamente.
5. Respete el agua y los peces
Los depredadores se encuentran entre los peces más valiosos de nuestras aguas. Si no pesca para comer, pruebe el método de captura y liberación. Desenganche el pez con cuidado y devuélvalo al agua. Gracias a ello, es posible que lo vuelva a pescar en el futuro, solo que más grande y con más experiencia.
